El libro: Han pasado varios años desde el caso del asesino en serie que trastocó para siempre su vida, y el comandante Camille Verhoeven aún no se ha repuesta del todo cuando un nuevo desafío vuelve a implicarlo personal y profesionalmente: Alex, una mujer de treinta años, ha desaparecido. No es una mujer cualquiera, y Verhoeven, sin sospechosos ni pistas, debe adentrarse en la investigación de su personalidad para poder encontrarla, mientras ella agoniza en un almacén abandonado. Cada minuto que pasa puede ser el último. Y él no se lo perdonaría nunca.
El autor de Vestido de novia e Irène vuelve a sacudirnos con este thriller escalofriante, una trama diabólica e imprevisible que lo confirma como el rey de la novela negra. Alex catapultó a Lemaitre a la fama internacional, al ser aclamado como el sucesor de Stieg Larsson; hoy su estilo es reconocido como único e inconfundible y cuenta con una legión de seguidores.
Mi opinión: Tras mis dos últimas lecturas que no acabé de disfrutar, me apetecía un libro fresco, ágil, entretenido, sin poner muchas aspiraciones en su lectura. Tenía muy pendiente seguir con la saga de Camille Verhoeven, hace poco salió su última novela, pero yo sólo había leído la primera. Así que me decidí a leer Alex, el segundo libro, esperando que su lectura me resultara tan grata como la del primero. Y tengo que decir que he acertado.
La historia está contada por dos narradores, que se van alternando los capítulos, la primera de ellos es Alex, nuestra protagonista, una joven de 30 años, que al principio del libro es secuestrada por un hombre, y encerrada en un almacén del que parece no tener ninguna posibilidad de salir con vida. El otro narrador es el propio comandante Camille, al que ya conocemos de su primer caso.
No conocía a este autor hasta que hace meses me lo recomendaron bastante, y tengo que decir que me vi sorprendido gratamente en mi primera incursión en sus libros, y con este segundo me ha pasado algo parecido. Es una escritura ágil, en la que es fácil llevar el ritmo, que mantienen la tensión hasta la última página, me ha parecido muy entretenido. Además es justo lo que buscaba.
Es un libro de poco más de 300 páginas, con más de 60 capítulos, así son capítulos de pocas páginas, con lo que un rato de lectura hace que pasen las páginas casi sin darse uno cuenta.
Pretendo leer la tercera parte en poco tiempo, no dejar pasar tanto tiempo. Porque aparte de haberme gustado, como pase mucho tiempo sin leer dos libros de una saga, me cuesta situarme de nuevo con los personajes, aunque en este libro aún me acordaba bastante bien. Y a vosotros ¿os pasa que si dejáis mucho tiempo entre dos libros de la saga se os olvidan muchas cosas o es sólo problema mío?
Valoración del libro: 4 de 5